Ya queda poco tiempo para irme… y aún creo que mi cabeza no lo asimila del todo… en unos días tendré que hacer maletas para tomar mi propio rumbo. Esta vez me voy sola, a un lugar desconocido, a miles de kilómetros de mi casa, de mi país, de mi familia… yo sé que quería hacer esto, me gustan las aventuras, y este reto me da la oportunidad de conocer otro ambiente, otra forma de pensar, sin embargo como en todo cambio me da un poco de miedo.
Estoy segura que después de los próximos meses no seré la misma persona, y sé también que no voy a encontrar lo mismo aquí. Aún tengo dudas de cómo será mi comportamiento siendo totalmente libre, si bien soy una persona bastante tranquila y seria, sé que el ambiente allá será mucho más abierto, y ya envuelta en todo eso, quizá deje de lado mi responsabilidad.
Espero que no sea así, pues estoy consciente de que cada decisión que tomo tiene consecuencias.
Hoy me asaltan un mar de dudas, regresaré con ese aire de inocencia que dicen que tengo? mis papás seguirán viendome como su peke? conoceré a alguien que me haga ser distinta? me irá bien en las clases? podré hacer muchos amigos? sabré cuidarme sola? podré finalmente definirme en todos los sentidos? hay posibilidad de que recaiga en mis problemas alimenticios? Y qué si no aguanto el frío? Y si cuando regrese ya no me gusta estar aqui?....
Más yo misma entro en razón y pienso: Adri, está es una oportunidad que no debes desaprovechar, disfruta y sé feliz que si tu esencia y tus valores son verdaderos permanecerán intáctos.
Ayer me preguntaron: y no tienes miedo de volar? jajaja no me dan miedo los aviones, si a eso te refieres...
jajaja ya somos dos
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